martes, 27 de octubre de 2015

Mateo 5,1-12a. domigo 1 de noviembre.



SOLEMNIDAD DE TODOS LOS SANTOS


Evangelio .
Al ver a la multitud, Jesús subió a la montaña, se sentó, y sus discípulos se acercaron a él.
Entonces tomó la palabra y comenzó a enseñarles, diciendo:
"Felices los que tienen alma de pobres, porque a ellos les pertenece el Reino de los Cielos.
Felices los pacientes, porque recibirán la tierra en herencia.
Felices los afligidos, porque serán consolados.
Felices los que tienen hambre y sed de justicia, porque serán saciados.
Felices los misericordiosos, porque obtendrán misericordia.
Felices los que tienen el corazón puro, porque verán a Dios.
Felices los que trabajan por la paz, porque serán llamados hijos de Dios.
Felices los que son perseguidos por practicar la justicia, porque a ellos les pertenece el Reino de los Cielos.
Felices ustedes, cuando sean insultados y perseguidos, y cuando se los calumnie en toda forma a causa de mí.
Alégrense y regocíjense entonces, porque ustedes tendrán una gran recompensa en el cielo; de la misma manera persiguieron a los profetas que los precedieron."

EL EVANGELIO NO ES UN SOMNIFERO, ES PURA DINAMITA:


¿ qué es ser santo?

Recuerdo cierto día – uno de tantos- que Juan Pablo II canonizó ( que canonizó a granel y con manguera)  a un "santo" fundador de una prelatura cuyo nombre no quiero acordarme……………… que dije, que no todos lo que declaran santos los papas, lo son; y que hay muchos que no declara la Iglesia , que sí lo son. Poco más y me cuesta el cuello, y el mártir hubiera sido yo.

-          ser santo es seguir siendo una persona normal y corriente que siente la insatisfacción que produce una visión del mundo donde los hombres aceptan como necesidad el tener y el poder por encima de todo.
-          Ser santo es ofrecer nuestra amistad a quien se encuentra solo, ser capaz de temblar cuando vemos que alguien vive en profunda soledad.
-          Ser santo es no aceptar la violencia a la que nos lleva la competición social, la separación de los hombres con barreras económicas, sociales, religiosas, raciales, nacionales….
-          Ser santo es saberse hijo de Dios, llamar con la vida y no con la boca a Dios Padre.
-          Ser santo es vivir con la limpieza de corazón suficiente como para caminar por la vida sin segundas intenciones, ofreciendo sinceridad y confianza.
-          Ser santo es tener confianza, esperanza y alegría, porque Jesús está con nosotros haciendo posible una convivencia nueva, un mundo mejor.
-          Ser santo es ser solidario.
-          …..

Para ser santo no son necesarios rezos extraordinarios, ni reprimir la alegría, ni sufrir mucho en la vida, ni ser moralmente perfectos. Hombres y mujeres santos andan por nuestras calles cada día, nos acompañan con humanidad y sencillez, en nuestras fábricas, oficinas, hospitales, tiendas, colegios…
                Lo más importante de esta fiesta es que ellos son de nuestra familia, pasaron por la vida haciendo el bien. No son ángeles, no son héroes, han tenido el  mismo camino que nosotros y han sabido conquistar la luz y la verdad. Han vivido el Evangelio con autenticidad y han escrito una historia de amor.
                Aquí no vale aquellos que dicen que quieren curas santos, cristianos santos, católicos santos, catequistas santos, madres de familia santas, etc, según su criterio, atendiendo a su modelo, eso es fanatismo, y muy peligroso.
                La santidad es una aventura, un riesgo, transformador del mundo, por eso dice San Agustín: “ muchos que Dios tiene no los tiene la Iglesia, y muchos que tiene la Iglesia no los tiene Dios”. O sea que uno no es santo porque lo diga el Papa, es santo porque su vida era conforme a su santidad….. y lo repito a riesgo de que me vuelva a costar la cabeza.
               
                Sería de justicia santificar a todos las víctimas de este mundo; de hambre, violencia, terrorismo, marginación, declarar a todos santos con mayúscula, ya Dios lo ha hecho hace tiempo…. Pero le lanzo el órdago al Papa Francisco.
               
La mayoría de los que hoy celebramos no hicieron nada especial, magnífico, fueron "normales", y  seguramente débiles: pero dijeron "sí' a Dios y mantuvieron ese "sí" en la vida de cada día, su amor no se interrumpió ni siquiera con los defectos y  caídas.

LAS BIENAVENTURANZAS SON OCHO AVENTURAS PARA SER FELIZ

-          Elegir ser pobre para encontrar la libertad.
-          Abordar el sufrimiento para encontrar la compasión.
-          Ser no-violento para dar alivio y refugio para los que buscan consuelo.
-          Tener sed y hambre de justicia para defender a los sin voz.
-          Prestar ayuda porque nos gustan las manos tendidas y no las manos cruzadas.
-          Tener limpio el corazón  porque no creemos en los hipócritas.
-          Trabajar por la Paz porque nuestros actos son de amor.
-          Vivir perseguidos porque quien vive el Evangelio de forma auténtica es incómodo y peligroso.

La única palabra que atenta contra las bienaventuranzas y te aparta directamente del camino de Jesús de Nazareth es decir: “ es imposible”. Los imposibles son el camino y la libertad nuestra compañera de viaje. P´alante


PARA LA REFLEXIÓN PERSONAL:

Parte del regalo
 Dicen que una vez una niña en África le dio a su maestra un regalo de cumpleaños. Era un hermoso caracol. "¿Dónde lo encontraste?", preguntó la maestra. La niña le dijo que esos caracoles se hallan solamente en cierta playa lejana. La maestra se conmovió profundamente porque sabía que la niña había caminado muchos kilómetros para buscar el caracol. "No debiste haber ido tan lejos sólo para buscarme un regalo", comentó. La niña sonrió y contestó: "Maestra, la larga caminata es parte del regalo". 


TOMAMOS EL PULSO A LA REALIDAD:






ttps://www.youtube.com/watch?v=ehR430jsBVY  ( Romero, el santo del pueblo)




artículo:
( por si queda algo que reflexionar)


¿Quién puede ser santo?

MARÍA DENISSE FANIANOS DE CAPRILES |  EL UNIVERSAL 




Todos los católicos podemos ser santos, y santos de altar. La llamada universal a la santidad, afirmación que es central en el Evangelio: "por eso, sed vosotros perfectos como vuestro Padre celestial es perfecto" (Mt 5, 48), es una llamada para todos los bautizados. El Concilio Vaticano II la proclamó solemnemente: "todos los fieles, de cualquier estado o condición, son llamados a la plenitud de la vida cristiana y a la perfección de la caridad, que es una forma de santidad que promueve, aún en la sociedad terrena, un nivel de vida más humano. Para alcanzar esa perfección, los fieles, según la diversa medida de los dones recibidos de Cristo, siguiendo sus huellas y amoldándose a su imagen, obedeciendo en todo a la voluntad del Padre, deberán esforzarse para entregarse totalmente a la gloria de Dios y al servicio del prójimo" (Lumen gentium, n. 40; cfr. nn. 39 y 41).

Sin embargo, no es tan fácil ser santo. Los diez pasos necesarios, según la legislación canónica vigente, para los procesos de las Causas de los Beatos y de los Santos son:

1.- Para iniciar una causa es preciso que pasen al menos 5 años desde la muerte del candidato. Ello facilita mayor equilibro y objetividad en la valoración del caso, y permitir decantar las emociones del momento. Solo el Papa puede dispensar de este primer requisito, si se dan razones especiales.

2.- Debe ser clara entre el pueblo de Dios la convicción sobre la fama de santidad y sobre la eficacia de la intercesión del candidato ante el Señor.

3.- La instrucción que comienza al proceso debe proceder del obispo de la diócesis donde ha muerto la persona sobre la que se pide la beatificación. El grupo promotor de la causa, que puede ser una diócesis, una parroquia, una congregación religiosa, una asociación, pide al obispo, a través del postulador, la apertura de la instrucción.

4.- Una vez presentada la causa el obispo de la diócesis, obtenido el "nulla obstat" de la Santa Sede, constituye un tribunal diocesano especial.

5.- Este tribunal diocesano, constituido por un juez, un promotor de justicia y un notario-actuario, han de llamar a los testigos presentados por la postulación o por el mismo tribunal para que testifiquen sobre hechos concretos y, si es posible, experiencias personales sobre cómo vivió su fe y cómo practicó las virtudes cristianas el candidato a la beatificación. Los testigos serán preguntados acerca de cómo vivió las 3 virtudes teologales (fe, esperanza y caridad) y las 4 virtudes cardinales (prudencia, justicia, templanza y fortaleza), así como las específicas de su propio estado de vida.

6.- Terminada la instrucción diocesana, las actas y documentación pasan a la Congregación para las Causas de los Santos (CCS), donde se elabora la copia pública. El postulador, residente en Roma, sigue la dirección de un relator de la Congregación la preparación de la "positio", que es la síntesis de los documentos que prueban el ejercicio heroico de las virtudes por parte del candidato.

7.- La "positio", se somete al examen teológico de 9 teólogos que emiten su voto. Si el parecer de la mayoría de los teólogos es favorable, la causa pasa al examen de los cardenales y de los obispos miembros de la Congregación.  Si el resultado es favorable, el prefecto de la CCS pasa el proceso al Papa para que proceda, si corresponde, a su aprobación y autorice a la Congregación a redactar el decreto correspondiente de reconocimiento de virtudes heroicas.  Sigue la lectura pública y la promulgación del decreto. Desde ese momento el candidato pasa a denominarse venerable siervo de Dios.

8.- El siguiente paso es el reconocimiento de un milagro atribuido a la intercesión del candidato. Este milagro ha de haberse producido después de su muerte. Se trata de una curación duradera y científicamente inexplicable después que el enfermo en su persona y/o a través de las oraciones de otras personas se haya encomendado al candidato a la beatificación. El milagro requerido es estudiado por una comisión de teólogos, una comisión médico-legal y finalmente por el consejo de cardenales y obispos miembros de la CCS. Con estos vistos buenos, se procede a que el Papa apruebe el milagro y se emane el decreto de reconocimiento de milagro.

9.- Promulgados los 2 decretos –el de virtudes heroicas y el del milagro-, el Papa decide la beatificación, que es la concesión del culto público limitado a un ámbito particular de la Iglesia. Con la beatificación, al candidato le corresponde el título de beato.

10.- Para la canonización hace falta otro milagro atribuido a la intercesión del beato y ocurrido después de su beatificación. Las condiciones y procesos para la verificación del milagro son las mismas que las seguidas para la beatificación. Mediante la canonización se concede el culto público en toda la Iglesia universal. Compromete la infalibilidad pontificia. Con la canonización corresponde el título de santo.

miércoles, 21 de octubre de 2015

Domingo 25 de Octubre - Mc 10,46-52



EVANGELIO
 
Después llegaron a Jericó. Cuando Jesús salía de allí, acompañado de sus discípulos y de una gran multitud, el hijo de Timeo -Bartimeo, un mendigo ciego- estaba sentado junto al camino.
Al enterarse de que pasaba Jesús, el Nazareno, se puso a gritar: "¡Jesús, Hijo de David, ten piedad de mí!".
Muchos lo reprendían para que se callara, pero él gritaba más fuerte: "¡Hijo de David, ten piedad de mí!".
Jesús se detuvo y dijo: "Llámenlo". Entonces llamaron al ciego y le dijeron: "¡Animo, levántate! El te llama".
Y el ciego, arrojando su manto, se puso de pie de un salto y fue hacia él.
Jesús le preguntó: "¿Qué quieres que haga por ti?". El le respondió: "Maestro, que yo pueda ver".
Jesús le dijo: "Vete, tu fe te ha salvado". En seguida comenzó a ver y lo siguió por el camino.

EL EVANGELIO NO ES UN SOMNÍFERO ES PURA DINAMITA

En tiempos de farándula política donde unos proponen el oro y el moro, y otros se justifican y buscan el milagro de la redención ciudadana ante tantos atropellos…en tiempos de pocas luces, pero de mucho precio de la luz….en tiempos de decepciones y lamentos, de banderas que se venden y se manchan….de nuevo el Evangelio emerge como única bandera digna y limpia por la que luchar y dejarse lo mejor de nosotros mismos en su defensa…y hoy se nos presenta con un significado y una actualidad tumbativas. El grito del ciego Bartimeo, es el grito de tantos desheredados de la tierra que claman una solución justa y digna para sus vidas. Desde el norte hasta el sur, pasando por el este y el oeste, es inmensa la cantidad de seres humanos que malviven, que mueren de las formas más inhumanas posibles y que piden, como el protagonista de hoy que tengamos piedad de ellas. No tenemos la solución a todos los males, ni podemos ser los salvadores de la patria, pero sí que está en nuestras manos el poner un poco que a otros se les multiplicara en mucho. Son muchas las instituciones, fundaciones, obras de la Iglesia, ONG,s que están trabajando y dando motivos para creer que el mundo puede cambiar, y ser mejor. Seguro que en mucha  de ellas participamos y colaboramos, pero el grito del tantos ciegos, hoy se dirige a nuestro corazón, a veces cansado de luchar y caminar, a ese corazón que late por los mejores valores posibles, que son los del profeta de Nazaret. Qué hago yo para poder decir que estoy contribuyendo a dar calor al mundo??...y que lo hago fundamentado, además, no en una teoría filosófica, ni en un momento de euforia mística…sino enraizado en el Evangelio, como Buena Noticia para todos.  Es momento de animarse y levantarse, porque como al ciego Bartimeo, Jesús nos llama a globalizar el amor, a festejar la amistad, a construir puentes de solidaridad, en definitiva, a seguirle desde la entrega generosa a los demás, aunque sea poco, aunque no parezca gran cosa….lo nuestro es sumar, nunca restar.

Os dejo varios ejemplos concretos, de personas que luchan por hacer un mundo mejor desde sus posibilidades y propuestas. El primero, un grupo de jóvenes, hasta arriba de ocupaciones, trabajos, estudios, etc…que llevan preparando una jornada solidaria desde hace unos días y lo hacen porque se comprometen desde su fe y solidaridad:



http://colegiovaldeluz.es/partidos-pro-tole-25-de-octubre/




Kike Figaredo, el “obispo delas sillas de ruedas”:

Mostrando pro_tole_2015.pdf.Kike Figaredo, el “obispo de las sillas de ruedas":http://sociedad.elpais.com/sociedad/2013/05/29/actualidad/1369843681_412700.html

Santiago Agrelo, un obispo franciscano en Tánger:

martes, 13 de octubre de 2015

Marcos 10,35-45. DOMUND. 18 DE OCTUBRE

NOTA MENTAL DE ÚLTIMA HORA.

 a propósito del trigo limpio:

Como experto en trigo y con una experiencia importante de años acribando en las eras de Castilla.... dejemé que le diga monseñor cañizares algún apunte importante:
estamos en octubre, época de siembra, quedan muchos meses para la cosecha... para recoger primero hay que sembrar... esta usted un poco despistado.
Lo que tiene que preguntarse es: si debajo de cada sotana de excelentísimo monseñor hay trigo limipio....
Lo que debe cuestionarse es: si detrás de cada bendición episcopal hay trigo limpio.....
Lo que debe interrogarle es : si detrás de cada procesión del corpus por las calles delToledo señorial con peineta y a lo loco hay trigo limpio......
 Quizás hace mucho tiempo que no medita Mateo 25: 35-45, donde dice: " cuando yo era emigrante refugiado Sirio y usted monseñor excelentísimo arzobispo de Valencia en su palacio episcopal con buena mesa y buen mantel, con buen color y buenos mofletes, me recogió y comimos juntos".
Esto es de un libro llamado Evangelio.... supongo que lo dejó olvidado en el estante de Miscelanea en la sede de la sagrada congregación para la doctrina de la fe. Pero como el  Papa Francisco está tan sensiblizado con la problemática de los refugiados se lo mandará rápido por valija diplomática,  más que nada pra que lo relea un poquito, no un muchito.
O quizás yo esté despistado, y esto sea un concurso de "gilipolleces superlativas" donde han llegado a la final el actor Willy Toledo y el monseñor Cañizares, y , si es así, la final va  a estar muy reñida y disputada.
Pero si lo que quiere es separar el trigo de la paja, como estamos celebrando el DOMUND, vayasé de misionero a Siria y allí es donde debe utilizar la criba, para esto hace falta los reaños que usted no tiene y a los misioneros le sobran.

fin de la nota mental.




Vigésimo noveno Domingo del tiempo ordinario

Evangelio
Santiago y Juan, los hijos de Zebedeo, se acercaron a Jesús y le dijeron: "Maestro, queremos que nos concedas lo que te vamos a pedir".
El les respondió: "¿Qué quieren que haga por ustedes?".
Ellos le dijeron: "Concédenos sentarnos uno a tu derecha y el otro a tu izquierda, cuando estés en tu gloria".
Jesús les dijo: "No saben lo que piden. ¿Pueden beber el cáliz que yo beberé y recibir el bautismo que yo recibiré?".
"Podemos", le respondieron. Entonces Jesús agregó: "Ustedes beberán el cáliz que yo beberé y recibirán el mismo bautismo que yo.
En cuanto a sentarse a mi derecha o a mi izquierda, no me toca a mí concederlo, sino que esos puestos son para quienes han sido destinados".
Los otros diez, que habían oído a Santiago y a Juan, se indignaron contra ellos.
Jesús los llamó y les dijo: "Ustedes saben que aquellos a quienes se considera gobernantes, dominan a las naciones como si fueran sus dueños, y los poderosos les hacen sentir su autoridad.
Entre ustedes no debe suceder así. Al contrario, el que quiera ser grande, que se haga servidor de ustedes;
y el que quiera ser el primero, que se haga servidor de todos.
Porque el mismo Hijo del hombre no vino para ser servido, sino para servir y dar su vida en rescate por una multitud".

EL EVANGELIO NO ES UN SOMNIFERO, ES PURA DINAMITA:


DIA MUNDIAL DE LAS MISIONES Y LOS MISIONEROS.

“No ha venido para que le sirvan sino para servir”.

Queridos amigos de la fusca…. Hasta ahora sólo hablamos en teoría de un mundo más cristiano, en esta semana de la banderita habría que decir que la única bandera auténtica es la del Evangelio, la única que no se puede manchar, ni adulterar,… en caros desfiles donde se despilfarra y se destina más dinero que a dar un soplo de esperanza a los sin voz de esta tierra.
 El mundo seguirá siendo  una teoría si no hacemos nada por cambiarlo.

De poco servirán nuestros esfuerzos, si en la calle no hacemos nada porque las cosas sean diferentes, la Palabra que hoy lanzamos al viento no sirve de disculpa, ni justificación, o nos la jugamos por Cristo o estamos jugando con Cristo. Si  este mundo no cambia es por un conformismo que nada tiene que ver con el Evangelio.

La religión de la llamada es diferente. Nuestra religión no debe imponer una doctrina, sino ofrecer  un camino de salvación. No dictamina sólo llama, invita. La religión de Jesús no busca el poder, es una religión de servicio. No es una religión del sometimiento, es más bien una invitación.
La ambición de los primeros discípulos era enorme, el deseo de poder, celos, envidias… sentarse a la derecha o  a la izquierda de Jesús.  Es la misma realidad que se vive hoy entre los cínicos e hipócritas poderosos que manejan los hilos de esta mierda de mundo. Es  la realidad que se vive entre  los impresentables y mediocres  políticos; vendedores de humo y corruptos manipuladores de la Verdad. Es la misma realidad que se vive entre los dirigentes de la religión, que la usan en su propio beneficio, sepulcros blanqueados que creen dirigir la religión y la fe ….. sólo se mueven por el poder. Pero en el grupo de Jesús de Nazareth sentarse a la derecha o a la izquierda es muy  fácil, sólo tenemos que contar  con la cruz, beber del cáliz, o sea correr la misma suerte que corrió él, entregando hasta la propia vida…  uno  puede sentarse a la derecha o a la izquierda sin problema.... Eso si, perdiendo la propia vida en favor de los demás, eso ya es más jodido.

En el Reino de Jesús no hay puestos de mando, no hay jerarquías, ni puestos de honor, a ver si nos vamos enterando de una santa vez.  Que lo tengamos muy claro, pomposos títulos que no valen de nada. En la vida diaria no se acepta la idea de servicio, todos quieren ser señores, todos quieren el puesto de privilegio, la comunidad cristiana es una comunidad sin servicio  y sin poder.... el privilegio sólo pertenece al Evangelio.

Los cristianos somos seguidores de alguien que ha dado su vida por los demás: dio su juventud, sus fuerzas, su esperanza, su amor, su tiempo, su energía..... lo más grande que podemos hacer nosotros es dar la vida por nuestros amigos.

Este es el secreto más grande de la vida y el más ignorado: vivimos intensamente la vida cuando la regalamos. Sólo se aprende a vivir cuando se hace vivir a otros. Cuando se ama a los amigos. Cuando hay ojos que miran a los ojos y corazones sin dobleces que sólo viven para servir. P´alante

                


EL Objetivo ES CAMBIAR EL MUNDO:

-          Ningún personaje que en la historia ha merecido la pena, no se ha detenido porque el mundo seguiría semi-podrido o semi-dormido. Porque ese aparente esfuerzo inútil, es la sal que sigue haciendo habitable este planeta.

ES LO QUE MUEVE Y HA MOVIDO A TODOS LOS MISIONEROS DEL MUNDO, POR LOS CUALES HOY, COMO TODOS LOS DÍAS… LA FUSCA DE LA VIDA SE SIGUE QUITANDO EL SOMBRERO.






TOMAMOS EL PULSO A LA REALIDAD:






Artículo, por si queda algo que reflexionar:


El poder impotente

LUIS UGALDE |  EL UNIVERSAL
miércoles 6 de mayo de 2015  12:00 AM
(….)

¿Qué es el poder? Los entendidos dicen que es la capacidad de lograr que otros hagan lo  que uno quiere. Poder es dominación sobre los otros. Los gobiernos dictatoriales se dedican a controlar todas las instancias y mecanismos para imponer y dominar: las armas, la policía, la economía, la información, o la vida diaria y los sentimientos de cada individuo.

Lograr que todos estén fichados, sus actividades reguladas y que necesiten permiso para comer, trabajar, divertirse, comprar, para entrar o salir, para viajar y pensar. En Alemania Oriental todos se sentían vigilados hasta por sus vecinos y familiares, bajaban la voz para que la conversación no fuera escuchada por terceros y no llegara a los cuarteles del poder. El régimen comunista logró cotas muy altas de control con la STASI -omnipresente policía secreta- con fronteras cerradas, con muros intransitables y con alambradas. Se creía que ese régimen era invencible, e impensable su derrumbe o su cambio; y un día todo ese poder cayó como un edificio sin cimientos y cual árbol con raíces muertas, sin que nadie disparara, ni desde dentro ni desde fuera.  El muro se cayó sin cañonazos, simplemente porque el régimen estaba muerto en el corazón y en las esperanzas de la gente. Casi no podían creérselo cuando amanecieron respirando libre y caminando en riada humana hacia el otro Berlín y la otra Alemania a abrazar al mundo como parte de sí mismos, sin que nadie les disparara ni pudiera impedirlo.

¿Por qué se derrumbó el poder omnipotente y se abrió esta sociedad donde todo estaba atado, controlado y vigilado? Porque el poder no es sólo dominio, ni capacidad de imponer a otros la propia voluntad. El poder es capacidad de lograr algo y de hacerlo bien. Cuando digo que no puedo hablar ruso, ni puedo cargar al hombro 200 kilos, ni correr 50 kilómetros en una hora, ni manejar un carro, estoy diciendo que no puedo, no soy capaz de hacerlo. Los gobiernos son para gobernar, para hacer que los ciudadanos alcancen sus aspiraciones fundamentales. Si lo logran, afianzan su popularidad, de lo contrario podrán imponerse, pero carecen de apoyo y aceptación y agonizan heridos de muerte. Si no puedo lograr que haya seguridad, ni harina, Pan, ni medicinas básicas, ni trabajo digno, ni que los ingresos de la gente alcancen para que su familia viva, ese poder, aunque controle todo, es impotente.

Se produce un gran vacío en el corazón de la gente al morir la esperanza que se tuvo. Los gobernantes dictatoriales suplen la falta de amor y de aceptación de los súbditos con temor y represión. Sí, pero hasta cierto punto... Un día gobernantes y súbditos descubren que el poder es impotente para lograr aquello que es fundamental para cada familia, cada ciudadano y para el conjunto de la sociedad. Quienes están en el poder ven que a sus súbditos les falta oxígeno y que cuanto más refuerzan la represión, más se enajenan la voluntad de los sometidos que ayer agachaban la cabeza y callaban.

(….) Con menos zanahoria y más palo, el burro se niega a caminar: el poder que es impotente para producir una sociedad medianamente aceptable tiene sus días contados. El  régimen no querido se transforma en usurpación y tiranía y se descubre que quien manda no tiene más poder que el prestado por el acatamiento de los súbditos; cuando estos se alzan en rebelión, se derrumba todo.  Un amanecer estalla la granja, se derrumban los controles, se pierde el respeto a la falsa autoridad, que ya es pura imposición. Cuando se ve venir ese precipicio, el instinto de conservación resquebraja el poder (¡hasta del bunker de Hitler salieron negociadores!) y unos buscan la transición como tabla salvadora para la mayoría.

Ahí llega el fin del poder impotente de una minoría.