![Resultado de imagen de viñeta sobre la navidad](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgLUe9fernkvGzWJbDCU8C3wJgpd9jhNM8KNIJyxumhX65F6M32dGTnRayDMp7aZ6zeU26OV9hNaM0XEIbE23PegB12GZNw0zx2YdBbJy0cRM4s8AeSdxjldCyCK06Hd6PB40AwC1p-Sak/s400/1357316264_876661_1357316387_noticia_normal.jpg)
Evangelio
En aquél tiempo, Jesús dijo a sus discípulos:
"Tengan cuidado y estén prevenidos, porque no saben cuándo llegará el momento.
Será como un hombre que se va de viaje, deja su casa al cuidado de sus servidores, asigna a cada uno su tarea, y recomienda al portero que permanezca en vela.
Estén prevenidos, entonces, porque no saben cuándo llegará el dueño de casa, si al atardecer, a medianoche, al canto del gallo o por la mañana.
No sea que llegue de improviso y los encuentre dormidos.
Y esto que les digo a ustedes, lo digo a todos: ¡Estén prevenidos!".
En aquél tiempo, Jesús dijo a sus discípulos:
"Tengan cuidado y estén prevenidos, porque no saben cuándo llegará el momento.
Será como un hombre que se va de viaje, deja su casa al cuidado de sus servidores, asigna a cada uno su tarea, y recomienda al portero que permanezca en vela.
Estén prevenidos, entonces, porque no saben cuándo llegará el dueño de casa, si al atardecer, a medianoche, al canto del gallo o por la mañana.
No sea que llegue de improviso y los encuentre dormidos.
Y esto que les digo a ustedes, lo digo a todos: ¡Estén prevenidos!".
EL EVANGELIO NO ES UN SOMNIFERO, ES PURA DINAMITA:
“ y a la hora que menos penséis”:
creemos que va a venir el día 25 y se presenta el día 3,
o el 26.
Creemos que va a llegar en el templo y se le encuentra
en el atrio de la parroquia, porque no pasa.
Es bastante sorprendente, imprevisible. Decimos que se
manifiesta de pan y se disfraza de pobre. Pero a lo mejor se le encuentra en la
palabra, en el canto, en el llanto, o en la mano tendida, en el grupo que
crece, en la familia que se une, o en el enfermo que sufre, en el niño que ríe,
o a lo mejor está en el obispo que vigila y dicta, o en el sindicalista que
lucha, o en la religiosa que reza, o la prostituta que ama.
Ser creyente es: sufrir con los que sufren, gozar con
los que gozan. Vivir la aventura de cada día, es un regalo. Hacer que la vida
de los que viven junto a mi sea más feliz, dejar que las personas respiren, se
sientan menos solas, ser más amables,
reeducar nuestra mirada; para hacerla más positiva, benévola y
misericordiosa, comprender y amar.
P´ALANTE
POR SI APETECE ORAR:
ADVIENTO
Para que Tú nacieras, se creó el escenario del universo,
se rompió el silencio de la eternidad,
apareció la luz, el canto y la armonía.
Para que Tú nacieras, fue necesario escribir el génesis,
y comprometer a Dios con una promesa.
Para que Tú nacieras, se escogió un pueblo
y Dios se enamoró de él como un esposo
y resonó la voz de los profetas
invitando al banquete de la vida y de la esperanza.
Para que Tú nacieras, se escogió una humilde Doncella de
tu pueblo y su respuesta te llamó a la vida.
Para que Tú nacieras, se pacificó la tierra,
se decretó un censo en Israel,
y un carpintero improvisó un establo,
porque no había lugar para Tí en la posada.
Para que Tú nacieras, Dios creó la vida.
Por eso, para que Tú sigas naciendo,
tengo que revestirme de verdad,
que mi vida sea creíble y mi palabra persuada,
será necesario que salga de mí mismo
y convertirme en un artesano de todo lo humano,
que tenga un taller en el corazón
y una herramienta en cada mano
para construir la casa de la fraternidad,
habituarme a la austeridad y así capacitarme para compartir.
Para que Tú sigas naciendo,
necesito detener la rapidez de mi vida,
ser obrero de espacios donde pueda encontrarme
con las personas por encima de las cosas.
Para que Tú sigas naciendo,
debo ser mensajero de todo lo que vive,
capaz de celebrar lo cotidiano
y trabajar por suprimir los signos de muerte
que ensombrecen al mundo y a la humanidad.
Para que Tú nacieras, se creó el escenario del universo,
se rompió el silencio de la eternidad,
apareció la luz, el canto y la armonía.
Para que Tú nacieras, fue necesario escribir el génesis,
y comprometer a Dios con una promesa.
Para que Tú nacieras, se escogió un pueblo
y Dios se enamoró de él como un esposo
y resonó la voz de los profetas
invitando al banquete de la vida y de la esperanza.
Para que Tú nacieras, se escogió una humilde Doncella de
tu pueblo y su respuesta te llamó a la vida.
Para que Tú nacieras, se pacificó la tierra,
se decretó un censo en Israel,
y un carpintero improvisó un establo,
porque no había lugar para Tí en la posada.
Para que Tú nacieras, Dios creó la vida.
Por eso, para que Tú sigas naciendo,
tengo que revestirme de verdad,
que mi vida sea creíble y mi palabra persuada,
será necesario que salga de mí mismo
y convertirme en un artesano de todo lo humano,
que tenga un taller en el corazón
y una herramienta en cada mano
para construir la casa de la fraternidad,
habituarme a la austeridad y así capacitarme para compartir.
Para que Tú sigas naciendo,
necesito detener la rapidez de mi vida,
ser obrero de espacios donde pueda encontrarme
con las personas por encima de las cosas.
Para que Tú sigas naciendo,
debo ser mensajero de todo lo que vive,
capaz de celebrar lo cotidiano
y trabajar por suprimir los signos de muerte
que ensombrecen al mundo y a la humanidad.
TOMAMOS EL PULSO A LA REALIDAD:
NOTA MENTAL TRANSITORIA:
PARÁBOLA DEL PADRE PRODIGO
En el tiempo moderno por todos
los rincones de la tierra se ha pregonado que Dios ha muerto o, al menos, se ha
ido o se ha callado. El autor alemán Heinz Zahrnt dice que la parábola del
Padre Pródigo refleja la situación de muchos ambientes actuales respecto a la
ausencia de Dios. El padre era ya muy anciano. Los hijos apenas lo tenían en
cuenta y empezó a sentirse un estorbo en la casa. Así que un buen día se largó.
Todos se pusieron a buscarlo, pero no apareció. Surgieron mil sospechas: ¿se
ausentó voluntariamente?, ¿se cayó al río?, ¿se fue a otro país,, ¿se murió?,
¿volverá?... Con el tiempo los hijos se han ido a sus negocios y tareas y, al
parecer, no echan de menos ni necesitan al padre. Tal vez algún día vuelva,
pero está pasando el tiempo y...
MANDE QUIEN MANDE, CARTUCHO EN EL CAÑÓN.