Evangelio
Jesús entró en un pueblo, Betania, y una mujer que se llamaba Marta lo recibió en su casa.
Tenía una hermana llamada María, que sentada a los pies del Señor, escuchaba su Palabra.
Marta, que estaba muy ocupada con los quehaceres de la casa, dijo a Jesús: "Señor, ¿no te importa que mi hermana me deje sola con todo el trabajo? Dile que me ayude".
Pero el Señor le respondió: "Marta, Marta, te inquietas y te agitas por muchas cosas,
y sin embargo, pocas cosas , o más bien, una sola es necesaria. María eligió la mejor parte, que no le será quitada".
Jesús entró en un pueblo, Betania, y una mujer que se llamaba Marta lo recibió en su casa.
Tenía una hermana llamada María, que sentada a los pies del Señor, escuchaba su Palabra.
Marta, que estaba muy ocupada con los quehaceres de la casa, dijo a Jesús: "Señor, ¿no te importa que mi hermana me deje sola con todo el trabajo? Dile que me ayude".
Pero el Señor le respondió: "Marta, Marta, te inquietas y te agitas por muchas cosas,
y sin embargo, pocas cosas , o más bien, una sola es necesaria. María eligió la mejor parte, que no le será quitada".
EL EVANGELIO NO ES UN
SOMNIFERO, ES PURA DINAMITA:
Betania; significa casa del pobre. O hacemos de nuestra vida
una acogida al pobre, al hermano más desvalido, al amigo, o no seremos
capaces de entender, el encuentro de
Jesús, Marta y María. No tendremos nada que ver con el Evangelio y lo que el indica con la acogida.
Lo primero que resalta de este Evangelio es la amistad; un
grupo de amigos se reúne: María, Marta y Jesús. Tres amigos. Nadie puede vivir
sin amigos. Con ellos se comparte lo más profundo de la vida. Amistad es esa
palabra que de tanto usarla mal se ha desvirtuado totalmente. Pero la amistad
verdadera es lo único capaz de dar la felicidad, está por encima del amor. Nadie tiene mayor amor que el que da la vida
por los amigos; comparte su vida con el amigo.
Sólo quien acoge al prójimo, sólo quien acoge al amigo con
todas las consecuencias, es capaz de acoger a Dios. P´alante
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Acabo de leer el enlace publicado anteriormente.
ResponderEliminarJosé Luis Garayoa me parece un gran ejemplo de acogida con todas las consecuencias al prójimo, al hermano, al pobre, al desamparado y abandonado por los gobiernos y los poderosos de este mundo.
"Aprendí que el coraje no era la ausencia de miedo, sino el triunfo sobre él. Valiente no es quien no siente miedo, sino aquél que conquista ese miedo". Nelson Mandela.
Que verdad es aquella de "quien tiene un amigo tiene un tesoro" o que "nadie puede vivir sin amigos".
ResponderEliminarCon ellos nace una amistad pura y desinteresada, vivimos y compartimos nuestra vida. Cuando les necesitamos no hace falta decírselo, ya lo saben. Están y estarán contigo en los buenos y malos momentos. Los queremos como a un hermano más y forman parte de nuestra familia.
Pero el ser humano es un ser que necesita estar en compañía, no puede ni debe vivir sólo. Al igual que no podemos vivir sin amigos, no podemos vivir sin amor.
No es la primera vez que leo en este blog como se equipara el sentimiento de amistad al del amor, e incluso en ocasiones el primero supera al segundo cosa que me llama la atención como afirmar que "la amistad verdadera es lo único capaz de dar la felicidad, está por encima del amor".
Porsupuesto que la amistad es muy importante. Pero amar y ser amado considero que es el mayor sentimiento que podemos experimentar.
Si la vida es un regalo que se nos ha concedido, creo que no lo es menos el compartir el compartir tu vida con aquella persona que amas.