EVANGELIO:
Uno de los maestros de la ley, que les había oído discutir,
se acercó a Jesús y le preguntó: "¿Cuál es el primero de todos los
mandamientos?" Jesús le contestó: "El primer mandamiento de todos es:
’Oye, Israel, el Señor nuestro Dios es el único Señor. Ama al Señor tu Dios con
todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas.’
Y el segundo es: ’Ama a tu prójimo como a tí mismo.’ Ningún mandamiento es más
importante que estos." El maestro de la ley dijo: "Muy bien, Maestro.
Es verdad lo que dices: Dios es uno solo y no hay otro fuera de él. Y amar a
Dios con todo el corazón, con todo el entendimiento y con todas las fuerzas, y
amar al prójimo como a uno mismo, vale más que todos los holocaustos y que
todos los sacrificios que se queman en el altar." Al ver Jesús que el
maestro de la ley había contestado con buen sentido, le dijo: "No estás
lejos del reino de Dios." Y ya nadie se atrevió a hacerle más preguntas.
EL EVANGELIO NO ES UN SOMNIFERO, ES PURA DINAMITA:
El que ama a Dios y al prójimo no está lejos del Reino de
Dios. Es curioso amigos, que teniendo todos esto tan claro, vivamos tan
confusamente . Desde hace tiempo yo me doy cuenta que mis alumnos cuando llego
a clase tratan de robar un poco de tiempo preguntándome por cuestiones
actuales, y antes procuraba despachar rápidamente sus cuestiones , pero quizás
sea conveniente darnos cuenta que hemos creído demasiado en las ideas y poco en
las vivencias . Tal vez porque las palabras son más cómodas que las acciones. Sembrar
gestos de amor… qué buena tarea.
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