EVANGELIO
17Se
ponía ya en camino cuando uno corrió a su encuentro y arodillándose ante él, le
preguntó: «Maestro bueno, ¿ qué he de hacer para tener en herencia vida
eterna?»18Jesús le dijo: «¿Por qué
me llamas bueno? Nadie es bueno sino sólo Dios.19Ya
sabes los mandamientos: No mates, no cometas adulterio, no robes, no levantes
falso testimonio, no seas injusto, honra a tu padre y a tu madre.»20El,
entonces, le dijo: «Maestro, todo eso lo he guardado desde mi juventud.»21Jesús,
fijando en él su mirada, le amó y le dijo: «Una cosa te falta: anda, cuanto
tienes véndelo y dáselo a los pobres y tendrás un tesoro en el cielo; luego,
ven y sígueme.»22Pero él, abatido por
estas palabras, se marchó entristecido, porque tenía muchos bienes.23Jesús,
mirando a su alrededor, dice a sus discípulos: «¡Qué difícil es que los que
tienen riquezas entren en el Reino de Dios!»24Los
discípulos quedaron sorprendidos al oírle estas palabras. Mas Jesús, tomando de
nuevo la palabra, les dijo: «¡Hijos, qué difícil es entrar en el Reino de Dios!25Es más
fácil que un camello pase por el ojo de la aguja, que el que un rico entre en
el Reino de Dios.»26Pero ellos se asombraban
aún más y se decían unos a otros: «Y ¿quién se podrá salvar?»27Jesús,
mirándolos fijamente, dice: «Para los hombres, imposible; pero no para Dios,
porque todo es posible para Dios.»
EL EVANGELIO NO ES UN
SOMNIFERO, ES PURA DINAMITA:
Para una
noche electoral, no podíamos tener mejor evangelio: anda, vende todo lo que
tienes, dáselo a los pobres, y luego sígueme… estos que se ríen tanto en las
campañas, no quieren saber mucho de pobres y menos de seguir un mensaje de
justicia y paz.
Todo indica
que el panorama político español está cambiando, pero lo que necesitamos
cambiar es el corazón…. Lo demás es todo secundario.
En el seguimiento de Jesús
sólo se acepta el amor. Hay que dejar todo lo que nos ata y no nos deja amar
con libertad, sea lo que sea:
-
la familia cuando nos
impide una entrega generosa
-
la infidelidad al
Evangelio que nos cierra las puertas al seguimiento.
-
La rutina que mata
nuestros ideales
-
La cobardía que
paraliza nuestro corazón y nuestros pies
-
Los miedos a que
quede destruida nuestra imagen
-
El aburguesamiento y
el inmovilismo.
Si amas lo que vives, el
amor será Palabra, y tu vida será Palabra de Dios, y todo el mundo podrá con
sencillez escuchar que sencillo es vivir auténticamente. Porque el Evangelio no
es para proclamarlo en los ambones de las iglesias sino para vivirlo – en toda
su autenticidad- en la Iglesia
que es el mundo, con sus calles, con sus gentes, con sus esperanzas.
Un mensaje de la fusca de la vida:
MANDE QUIEN MANDE CARTUCHO EN EL CAÑÓN. P´ALANTE
Ser radical en el AMOR...es lo único que cuenta...
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