EVANGELIO:
Los judíos, como era el día de la Preparación, para que no quedasen los cuerpos en la cruz el sábado - porque aquel sábado era muy solemne - rogaron a Pilato que les quebraran las piernas y los retiraran.
Fueron, pues, los soldados y quebraron las piernas del primero y del otro crucificado con él.
Pero al llegar a Jesús, como lo vieron ya muerto, no le quebraron las piernas, sino que uno de los soldados le atravesó el costado con una lanza y al instante salió sangre y agua.
El que lo vio lo atestigua y su testimonio es válido, y él sabe que dice la verdad, para que también vosotros creáis.
Y todo esto sucedió para que se cumpliera la Escritura: No se le quebrará hueso alguno.
Y también otra Escritura dice: Mirarán al que traspasaron.
EL EVANGELIO NO ES UN SOMNIFERO, ES PURA DINAMITA:
Es el Evangelio del corazón de Jesús. O sea, una invitación a vivir con uncorazón entregado, generoso y acostumbrado a darse, como el corazón de Jesús. Todos los que creemos en Jesús, viviremos con él y como él... la Verdad de la vida está a pie de calle, allí donde gente generosa y entregada hace realidad la Buena Nueva del amor inquebrantable que se desgastó por tantos sin pedir nada a cambio.
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Al leer este comentario, me viene a la ente la impresionante figura de Vicente Ferrer, que ha fallecido hoy...él supo y quiso desgastarse sin pedir nada a cambio...todo un ejemplo y un testigo...un evangelio con patas...por cierto esto de la fusca de la vida también me suena a eso...proyectos, sueños, ilusiones, esperanza...Ánimo siempre, pues siempre alguien lo necesita...
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