Sábado 13 de junio. Mateo 5, 33-37

EVANGELIO
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: -«Habéis oído que se dijo a los antiguos: "No jurarás en falso" y "Cumplirás tus votos al Señor". Pues yo os digo que no juréis en absoluto: ni por el cielo, que es el trono de Dios; ni por la tierra, que es estrado de sus pies; ni por Jerusalén, que es la ciudad del Gran Rey. Ni jures por tu cabeza, pues no puedes volver blanco o negro un solo pelo. A vosotros os basta decir "sí" o "no". Lo que pasa de ahí viene del Maligno.»
EL EVANGELIO NO ES UN SOMNIFERO, ES PURA DINAMITA:
No hay que hablar demasiado, ni llenarse la boca de grandes discursos….no hay que jurar y prometer, sino que lo que hace falta es actuar, pasar a la acción y no tanta contemplación. Es así como seremos cristianos testigos y no cristianos de salón y de sacristía. Para poder tener autoridad, como la tuvo Jesús, hay que ser coherentes entre lo que se dice y lo que se hace. Permitirme que dude de la autoridad de muchos que sí que juran y prometen, pero a la hora de la verdad en el hecho concreto de comprometerse en con quien deben, dan la callada por respuesta. Ojala no seamos de esos, o al menos intentémoslo.