No creáis que vine para abolir la Ley o los Profetas: yo no he venido a abolir, sino a dar cumplimiento. Les aseguro que no desaparecerá ni una coma de la Ley, antes que desaparezcan el cielo y la tierra, hasta que todo se realice. El que no cumpla el más pequeño de estos mandamientos, y enseñe a los otros a hacer lo mismo, será considerado el menor en el Reino de los Cielos. En cambio, el que los cumpla y enseñe, será considerado grande en el Reino de los Cielos.
EL EVANGELIO NO ES UN SOMNIFERO, ES PURA DINAMITA:
Las cosas claras y el chocolate espeso...y no pensemos que la ley de la que habla Jesús, es la vieja, la antigua, la de los mandamientos en piedra, no es esa, para nada, a la que ley que se refiere es a la que está escrita en carne, en su corazón, en los hechos que él protagonizó que no tienen que ver con cumplir preceptos y normas , sino que tienen que ver con amar. Y amar no se lleva a cabo con las palabras, sino de la boca para fuera, con gestos, detalles que nos hablan de ternura, comprensión, misericordia, lealtad, etc....lo tenemos claro o preferimos pensarnos santos por cumplir el decálogo obsoleto aunque no amemos?????.....Palante y no olvidemos que largo se le hace el día al que no ama, y él lo sabe....
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