jueves, 21 de marzo de 2013

REFLEXIÓN PARA EL TIEMPO DE PASCUA




Credo PARA UNA COMUNIDAD EN PASCUA.
Creo en Dios
Que no acabó de hacer el mundo,
Ni lo dejó como intocable;
Que no gobierna con leyes eternas,
Que son invariables,
Ni conforme a los estamentos naturales
De pobres y ricos,
De sabios y uniformados
De explotadores y explotados.
Creo en Dios,
Que gusta de lo auténtico en la vida
Quiere el cambio de las estructuras
Por nuestro trabajo y con nuestra libertad.

Creo en Jesús de Nazareth,
Que, siendo único y no pudiendo
Hacer nada, como nos ocurre a nosotros,
Tuvo razón al trabajar hasta morir
Por cambiar el mundo.
Tomándole a él por medida,
Nos damos cuenta de que
Nuestra inteligencia está deformada,
Nuestra fantasía achaparrada,
Nuestros empeños empobrecidos,
Pues no vivimos como él vivió.

Cada día me angustia la idea
De que muriera en vano,
Porque, traidores a su revolución
Somos miedosos y serviles al poder.

Creo en Jesús,
Que resucita en nuestra vida,
Para que nos veamos libres
De prejuicios e insolencias,
De temores y odios
Tomando en las manos su radicalidad
Y llevándola hasta las puertas de su reino.

Creo en el Espíritu,
Que con Jesús vino al mundo,
En la comunión de todos los pueblos
Y en nuestra responsabilidad
De lo que puede ser nuestra tierra,
Un valle de lágrimas, hambre y violencia
O la ciudad de Dios, del amor.

Creo en la paz justa,
Que se pude instaurar,
En la posibilidad de una vida
Con sentido para todos los hombres y mujeres
Y en el futuro de este mundo de Dios. Amén.

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