lunes, 27 de enero de 2014

Marcos 3: 31 - 35. martes 28 de enero

EVANGELIO

31
Llegan su madre y sus hermanos, y quedándose fuera, le envían a llamar.
32
Estaba mucha gente sentada a su alrededor. Le dicen: «¡Oye!, tu madre, tus hermanos y tus hermanas están fuera y te buscan.»
33
El les responde: «¿Quién es mi madre y mis hermanos?»
34
Y mirando en torno a los que estaban sentados en corro, a su alrededor, dice: «Estos son mi madre y mis hermanos.
35
Quien cumpla la voluntad de Dios, ése es mi hermano, mi hermana y mi madre.»
EL EVANGELIO NO ES  UN SOMNIFERO, ES PURA DINAMITA.:

El que cumple la voluntad de Dios, ni que fuera fácil… ese es mi hermano,  mi madre  y lo que haga falta.
No estamos hablando de mandamientos, preceptos y mandatos. Dios sería demasiado pobre si lo reducimos a esto. Es misericordia, perdón incondicional, compasión, sentir con…, es amor incondicional.

Tiende la mano a tu enemigo, lucha por la paz – pero no soltando globos y palomas blancas- lucha por ella en el trabajo, en la familia, en la calle. Quien lucha por la paz defiende la justicia para todos. No te rindas en las adversidades y descubre las necesidades de los más próximos para darles salida real. No te quedes en caprichos del destino, el objetivo es cambiar el mundo. Y todo esto en silencio, no hagas ruido. Estos son mi madre y mis hermanos… la fusca. P´alante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario