lunes, 19 de enero de 2009

Martes, 20 de enereo de 2009. Evangelio Mc 2,23-28

EVANGELIO

Un sábado, atravesaba el Señor un sembrado; mientras andaban, los discípulos iban arrancando espigas. Los fariseos le dijeron: -«Oye, ¿por qué hacen en sábado lo que no está permitido?» Él les respondió: -« ¿No habéis leído nunca lo que hizo David, cuando él y sus hombres se vieron faltos y con hambre? Entró en la casa de Dios, en tiempo del sumo sacerdote Abiatar, comió de los panes presentados, que sólo pueden comer los sacerdotes, y les dio también a sus compañeros.» Y añadió: -«El sábado se hizo para el hombre y no el hombre para el sábado; as! que el Hijo del hombre es señor también del sábado.»

EL EVANGELIO NO ES UN SOMNIFERO, ES PURA DINAMITA:

Este tumbativo Evangelio en el que Jesús se muestra radicalmente opuesto a quienes quieren confundirle con sus preguntas, nos viene a recordar que las normas se hicieron para el hombre y no el hombre para las normas. Extrapolando esto al ámbito religioso de nuestros días nos podemos preguntar si la cantidad de normas, preceptos, obligaciones y deberes que la moral católica impone sobre los cristianos, están basadas en el espíritu de Jesús, o más bien en otros intereses particulares y no muy claros. Podemos decir sin miedo a equivocarnos, que la ley del cumplimiento de las normas religiosas, como puede ser el ir a Misa todos los Domingos, el confesar periódicamente los pecados, etc, no es garantía de felicidad ni de ser mejor persona. El mero cumplimiento (cumplo y miento) no sirve absolutamente para nada. ¿ De qué sirve ir a misa todos los domingos y comulgar a Jesús, si no comulgas con tu hermano que tienes al lado? ¿Si al salir de la Iglesia no miras a los otros con los ojos de la comprensión y la ternura?. Dios nos quiere buenos y felices, y no actores de teatro que se ponen la máscara del quedar bien ante lo que puede ser un mero rito cumplidor…sería muy triste que los cristianos hiciéramos de nuestra vida un teatro y que aparentáramos externamente lo que en el interior ni se vislumbra. Por eso, porque las normas y preceptos se hicieron para el hombre, participemos de la vida entregada de Jesús convencidos de que se debe llevar a la vida diaria y cotidiana y si no ¿para que sirve?...Si vas a cumplir la obligación de ir a misa y no te comprometes a amar sobre todo a los más débiles, quédate en casa porque no tendrá mucho sentido. En nuestras Iglesias debería haber una gran señal de prohibido en la que se pudiera leer: “ABSTENERSE DE COMULGAR LOS QUE NO ESTÉN DISPUESTOS A AMAR”.






1 comentario:

  1. genial!! la ultima frase es sencillamente genial. Es muy interesante el blog entero. la fusca siempre es interesante!!!

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