miércoles, 11 de enero de 2012

Jueves 12 de enero. Mc 1,40-45

EVANGELIO

Entonces se le acercó un leproso para pedirle ayuda y, cayendo de rodillas, le dijo: "Si quieres, puedes purificarme".
Jesús, conmovido, extendió la mano y lo tocó, diciendo: "Lo quiero, queda purificado".
En seguida la lepra desapareció y quedó purificado.
Jesús lo despidió, advirtiéndole severamente:
"No le digas nada a nadie, pero ve a presentarte al sacerdote y entrega por tu purificación la ofrenda que ordenó Moisés, para que les sirva de testimonio".
Sin embargo, apenas se fue, empezó a proclamarlo a todo el mundo, divulgando lo sucedido, de tal manera que Jesús ya no podía entrar públicamente en ninguna ciudad, sino que debía quedarse afuera, en lugares desiertos. Y acudían a él de todas partes.
 
EL EVANGELIO NO ES UN SOMNÍFERO, ES PURA DINAMITA:
Acostumbrados, desgraciadamente, a tantos gestos de frialdad y deshumanización, hoy Jesús se nos presenta conmovido…su corazón se encoge ante las adversidades de los otros y solo tiene gestos y palabras de consuelo y esperanza. Este es el Dios de Jesús, que vive como siente, que se lanza a la aventura de la vida arriesgando en todas sus acciones…no hay más riesgo que no arriesgar…la vida es demasiado corta y frágil como para darle carta de eternidad y permanecer inmóviles en el sillón de casa…Miremos a nuestro alrededor y busquemos a los leprosos de nuestros días, a los que nadie quiere ni siquiera tocar ni ver…si no nos creemos esto, si no nos conmovemos antes las situaciones de dolor e injusticia no leamos nunca más el evangelio, pues estaremos prostituyendo su mensaje…y no es solo conmoverse pasivamente sino que se he de pasar a la acción y aquello que esté en nuestras manos hacerlo para consolar y mitigar el dolor ajeno…no están lejos nuestros leprosos, demasiado cerca como para no verlos y tenderles la mano…miro a mi alrededor y veo al hombre que impertérrito y cumpliendo como si fuera su jornada laboral se planta a las 9 de la mañana en la puerta del Día y no se va hasta la noche aterido de frío e incertidumbre…miro a mi alrededor y veo a aquellos que la historia ha roto desde el primer momento y sin ni siquiera preguntarles…me acuerdo de Álvaro que lucha por aprender con muchas dificultades…de Ignacio, cuya parálisis cerebral le hace estar pero no sabemos si ser…de Manuel que con 11 años está en un centro de acogida porque las cosas no salieron como debían…de Carmen, cuya mayor ilusión era tener unas gafas para poder ver bien y no podía comprarlas, los reyes mágicos se las trajeron…de las dos hermanas que cada mañana caminan desorientadas hacia el colegio desde que en el mes de octubre su padre cogiera la autovia al revés y se matara contra un camión…de Samuel, que sigue sin aceptar la separación de sus padres y no es capaz de entender porqué le toca a él…de José Carlos que siguen entrampado en los designios económicos y que sufre situaciones familiares que le llevan a afirmar que no es feliz y que nota como está perdiendo la vida…de Tino que entre la esperanza y la zozobra no sabe si reír o llorar cada vez que las caprichosas plaquetas le marcan el camino del trasplante y el quirófano…y así podíamos llenar hojas y hojas…y no son anónimos, los vemos, los tocamos, los queremos, nos conmueven…no es fácil, es el camino de la fusca….Palante….

No hay comentarios:

Publicar un comentario