lunes, 30 de septiembre de 2013

Lucas 9: 46 - 50 . 30 septiembre


EVANGELIO

46
Se suscitó una discusión entre ellos sobre quién de ellos sería el mayor.
47
Conociendo Jesús lo que pensaban en su corazón, tomó a un niño, le puso a su lado,
48
y les dijo: «El que reciba a este niño en mi nombre, a mí me recibe; y el que me reciba a mí, recibe a Aquel que me ha enviado; pues el más pequeño de entre vosotros, ése es mayor.»
49
Tomando Juan la palabra, dijo: «Maestro, hemos visto a uno que expulsaba demonios en tu nombre, y tratamos de impedírselo, porque no viene con nosotros.»
50
Pero Jesús le dijo: «No se lo impidáis, pues el que no está contra vosotros, está por vosotros.»

EL EVANGELIO NO ES UN SOMNIFERO, ES PURA DINAMITA:

Cuanta poltrona absurda, cuanto incienso hipócrita, cuanta titulitis  sin sentido….. y que poca humildad. Hay tanta gente a 3M SC( sobre el  cielo) que cualquier día nos empiezan a llover gilipollas. Por favor, que paren el tren y  se monte la humildad a dirigir la ruta.
Lo habrás oído más de una vez. Importantes expertos en ciencias humanas aseguran que, de ordinario, la mayoría de las personas solo viven un diez por cien o tal vez menos de lo que podrían vivir y disfrutar.
Solo vemos una pequeña parte de la belleza que nos rodea. Escuchamos únicamente algunos fragmentos de la música, la poesía y la vida que resuena en nuestro entorno. Solo estamos abiertos a un campo muy limitado de emociones, sentimientos y pensamientos. Nuestro corazón solo conoce una parte de las experiencias posibles de ternura y amor.
Nos quedará el reto de la humildad. P´alante

1 comentario:

  1. Ser como un niño, qué difícil. Ellos ríen cuando tienen que reir, lloran cuando tienen que llorar. No les importan el qué dirán, o lo que el resto puedan pensar. Son puros, no andan con tapujos, son divertidos, quieren jugar, son sencillos y nosotros "los adultos" queremos tenerlos jugando con maquinitas y entretenidos para que no molesten. Dejémosles que nos rodeen, estemos con ellos que seguro algo se nos contagia. Y recordad nosotros también fuimos niños. Que esa sencillez y humildad que tienen los pequeños se nos pegue un poquito., sólo con un poquito más de humildad podemos cambiar muchas cosas, seguro. Animo.

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