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Decía a todos: «Si alguno quiere venir en pos de mí,
niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame.
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Porque quien quiera salvar su vida, la perderá; pero quien
pierda su vida por mí, ése la salvará.
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Pues, ¿de qué le sirve al hombre haber ganado el mundo
entero, si él mismo se pierde o se arruina?
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Porque quien se avergüence de mí y de mis palabras, de ése
se avergonzará el Hijo del hombre, cuando venga en su gloria, en la de su
Padre y en la de los santos ángeles.
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EL EVANGELIO NO ES UN SOMNIFERO, ES PURA DINAMITA:
Llevamos una cruz en el pecho, tenemos cruces en
nuestras casas... pero significa
realmente algo. No podemos dejar que la rutina elimine un significado tan
profundo: la cruz, mirar al crucificado es:
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bajar de la cruz a todos los crucificados,
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no podemos vivir con los brazos cruzados cuando muchos
hermanos nuestros los tienen en cruz.
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Dichosos son aquellos que saben llevar algo más que el
peso de sus problemas y preocupaciones.
Hemos colgado la cruz, en torres altas, en templos
hermosos, en valles, hermitas y profundos monasterios, en nuestros
cuellos, en nuestras casas, en nuestras mesas de trabajo, las
hemos cubierto de oro, plata, piedras preciosas y la usamos como
adorno..... queridos amigos de la fusca….Esto es una cruz descrucificada.
La cruz de Jesús, la cruz del Evangelio, no tiene adornos, no es atrayente, Jesús
de Nazareth, fue a la cruz, solo, desarmado y con miedo... pero con la
ventaja que da la esperanza, la esperanza de una vida construida con el amor.
Las víctimas de cada día, los enfermos, la cruz de los hospitales, hogares con
necesidades, la cruz de los ancianos, de los que viven en soledad, de niños explotados,
condenados a muerte de mujeres maltratadas, de víctimas del terrorismo y la
violencia.... esas cruces..... son un afrenta al hombre, una ofensa a Dios,
......Estas cruces son un escándalo.... y aquí no sirven
predicaciones piadosas, tampoco aludir a la voluntad de Dios ( el
quiere salvarnos), ni apelar a la fe.... cuando muchos hermanos nuestros
malviven y mueren crucificados, si llevas la cruz en tu pecho es porque te compometes….sólo con el
compromiso que vivió el más injusto de los condenados, que fue Jesús de
Nazareth, el compromiso de liberación de todos los crucificados y
oprimidos, con el compromiso diario de bajar de la cruz a todo aquel que lo
necesite.
No
existe ante la cruz otra respuesta que
el grito silencioso de rebeldía que se escucha cuando alguien ama de
verdad y hace el sufrimiento del hermano menos pesado. P´alante
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