lunes, 21 de marzo de 2011

Martes 22 de marzo. Mt 23, 1-12

EVANGELIO
"Los escribas y fariseos ocupan la cátedra de Moisés; ustedes hagan y cumplan todo lo que ellos les digan, pero no se guíen por sus obras, porque no hacen lo que dicen. Atan pesadas cargas y las ponen sobre los hombros de los demás, mientras que ellos no quieren moverlas ni siquiera con el dedo. Todo lo hacen para que los vean: agrandan las filacterias y alargan los flecos de sus mantos; les gusta ocupar los primeros puestos en los banquetes y los primeros asientos en las sinagogas, ser saludados en las plazas y oírse llamar 'mi maestro' por la gente. En cuanto a ustedes, no se hagan llamar 'maestro', porque no tienen más que un Maestro y todos ustedes son hermanos. A nadie en el mundo llamen 'padre', porque no tienen sino uno, el Padre celestial. No se dejen llamar tampoco 'doctores', porque sólo tienen un Doctor, que es el Mesías. Que el más grande de entre ustedes se haga servidor de los otros, porque el que se ensalza será humillado, y el que se humilla será ensalzado".

EL EVANGELIO NO ES UN SOMNIFERO, ES PURA DINAMITA:

Los escribas y fariseos siguen ocupando muchas cátedras, siguen doblando la cerviz y dejando sus vergüenzas al aire en forma de condenas y excomuniones. La última la del “Pare Manel”, un cura catalán que lleva más de 30 años ayudando a familias y necesitados y que ha publicado un libro en él que expone como hace años ayudó a una chica a abortar y a evitar que se desangrara porque la realidad y circunstancia así lo requerían, y lo hizo con el corazón, con coherencia y misericordia. Pues bien, los jerarcas se han escandalizado y se lo quieren trincar, amparándose en el Derecho Canónico, que me tocó estudiar hace años y que reserva la excomunión para quien procura el aborto, pero que también dice en su canon 1323 que exime de ella a quien actuó por necesidad o para evitar un grave perjuicio…que me importa un carajo lo que diga, pero que no lo usen a su antojo. No entienden lo que es estar al pie del cañón, en las cunetas de la vida, en la marginalidad y pobreza que nos humanizan. Quédense con su historia, que son su pan se lo coman. Hoy desde aquí brindo por el Padre Manel, por su humanidad y sensibilidad, y me entristezco por la sinrazón y mediocridad de una cúpula que ha perdido el norte y que da palos de ciego. Hoy les decimos con Jesús (al que también hubieran excomulgado): “No nos fiamos de vuestras obras, no hacéis lo que decís, todo lo hacéis para que os vean, os gusta ocupar los primeros puestos, ser saludados…que os besen los anillos, que os hagan reverencias…venga ya, menos desfiles y más canela en rama…
Nuestra jerarquía sistemáticamente se ha apuntado últimamente a la condena, se ha olvidado del lado bueno de este mundo, se ha negado a sonreír. No se asoma a la ventana para descubrir que hay luces, alegría, esperanza en personas de dentro y de fuera. ¿No se dan cuenta de que se están convirtiendo en los pepitos grillos de la sociedad, los fiscales de luto que lejos de animar, condenan?. Son los enemigos de la fiesta y el evangelio. Palante y al turrón.

1 comentario:

  1. El título de su biografía "Pare Manel, más cerca de la tierra que del cielo" lo dice todo, no creéis?
    Uno de los representantes más importantes del Vaticano, Rino Fisichella, responsable del Pontificio Consejo para la Nueva Evangelización, dejó clara la que debe ser la postura de la Iglesia con el sacerdote catalán: "Ante la gravedad del aborto, no se puede razonar sólo con emotividad; hay que pensar con lucidez, distinguir el bien del mal. La emotividad ayuda a crear una relación de benevolencia, pero no es suficiente. Y el trabajo social no lo es todo en la vida de un sacerdote; sólo es eficaz si se hace en la verdad del Evangelio".
    En palabras del sacerdote:“Creer en Dios no es creer ciegamente en una normativa de buena fe, de educación, de buenas costumbres, sino dar de beber o de comer a los pobres”. No es esta una labor hecha en la verdad del Evangelio??

    ResponderEliminar