jueves, 21 de mayo de 2009

Viernes, 22 de Mayo de 2009. Juan 16, 20-23a

EVANGELIO

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: - «Os aseguro que lloraréis y os lamentaréis vosotros, mientras el mundo estará alegre; vosotros estaréis tristes, pero vuestra tristeza se convertirá en alegría. La mujer, cuando va a dar a luz, siente tristeza, porque ha llegado su hora; pero, en cuanto da a luz al niño, ni se acuerda del apuro, por la alegría de que al mundo le ha nacido un hombre. También vosotros ahora sentís tristeza; pero volveré a veros, y se alegrará vuestro corazón, y nadie os quitará vuestra alegría. Ese día no me preguntaréis nada.»

EL EVANGELIO NO ES UN SOMNÍFERO, ES PURA DINAMITA:

De nuevo la promesa de la alegría. No hay mucho más que comentar distinto a lo que decíamos ayer. Sólo reafirmarnos en que el encuentro con Jesús, su presencia entre nosotros es causa, fuente de gozo, de alegría. Y de esta certeza podríamos contar muchas experiencias. Sólo nos queda animar, alentar a todos los que compartís la Palabra con nosotros a poner en común lo que vivís y cómo la entrega diaria a los demás, el saber que Jesús está presente en medio de nosotros y en nuestra vida nos hace felices.

No hay comentarios:

Publicar un comentario