lunes, 5 de marzo de 2012

Lunes 5 de marzo. Lc 6,36-38

EVANGELIO:

Sed compasivos, como vuestro Padre es compasivo.
No juzguéis y no seréis juzgados, no condenéis y no seréis condenados; perdonad y seréis perdonados.
Dad y se os dará; una medida buena, apretada, remecida, rebosante pondrán en el halda de vuestros vestidos. Porque con la medida con que midáis se os medirá.»

EL EVANGELIO NO ES UN SOMNIFERO, ES PURA DINAMITA:
Que llamada más urgente hace el de nazareth a la sensatez y a la generosidad. No es bueno ir por la vida apuntando con el dedo, juzgando siempre y condenando a veces. No es propio de la generosidad del Dios de Jesús. Si nos creemos de verdad que somos seguidores de Jesús de Nazareth se abre ante nosotros el reto de la aceptación incondicional del prójimo y no juzgar al amigo. Que grande sería que nos empaparamos de la compasión, esa palabra suave que cuando se vive se hace grito. En un mundo tan globalizado como deshumanizado debemos ser los compasivos por excelencia. No es fácil. Ser compasivo con el alumno que no avanza y retrasa, con el compañero que nos harta, con el marido o mujer al que no entendemos, con el hijo o hija que no nos hace caso.... vaya tela, pero es lo que nos enseña Jesús y así queremos intentar ser. Una semana por delante para ponerlo en práctica.

No hay comentarios:

Publicar un comentario